No puedo hablar por el, pero si por Julieta, me di cuenta que estaba enamorada, al principio senti una sensacion extraña, quiza estabamos jugando muy al limite, quiza esto deberia ser solo un juego sexual, pero por alguna razon, me exitaba verla asi, enamorada y enajenada.
Poco despues mis ideas se acomodaron, entendi que no solo soy cornudo, sino tambien polyamoroso, entiendo y acepto que una persona puede enamorarse de 1 o mas personas, y lo reconozco... me encantaba que Oswaldo hubiera logrado conquistar a Julieta.
Cuando haciamos el amor, ella me hablaba de el, me decia que pensaba en el mientras la penetraba, que deseaba volver a ser su mujer, y cuando llegaban sus orgasmos... ella decia su nombre.
Pero nos complicaba el tema del horario, para mi era imposible salir entre semana y para el era imposible quedarse en la ciudad un fin de semana, asi que el tiempo pasaba y ellos no podia verse, hasta que Oswaldo le pidio a Julieta verse aunque fuera una vez, entre semana.
Hice un gran esfuerzo y acepte, fue un martes y lo recuerdo bien, Julieta se alisto, se puso guapisima, paso por mi trabajo y de alli nos fuimos juntos a casa de Oswaldo.
Julieta traia unos leggins grises, una player pegada al cuerpo con un escote delicioso, cuando llegamos, tocamos el timbre y salio Oswaldo a recibirnos, abrio la puerta, me saludo, y tomo a Julieta por el rostro y la beso en los labios.
Entramos y casi no hubo pre ambulo, comenzaron a besarse como locos, las manos de el recorrieron todo lo que quisieron, ella entragaba cada parte para ser acariciada, su actitud era de completa entrega, una vez mas, no llegaron al dormitorio... creo que eso es algo que Julieta nunca olvidara, Oswaldo nunca la llevo a la cama, siempre fue suya sobre un sillon.
Oswaldo la sento sobre el, ella frotaba su culo contra el pene de el, la ropa esta sobrando... el se anima y le levanta la playera, ella levanta los brazos para ser desvestida, se pone de pie como pidiendo que le quiten los leggins, el se los quita... la manosea las nalgas, ella casi esta por llorar de placer, ella mete sus manos en la camisa de Oswaldo, lo acaricia, lo idolatra, luego busca la cremallera de su pantalon... estaba loca por volver a sentir su verga en sus manos, me lo habia dicho muchas noches.
Le baja el pantalon, se podia apreciar una verga prominente bajo la ropa interior... El sigue sentado casi tendido en el sillon, ella se pone frente a el, se arrodilla frente a el, le saca la verga hacia afuera y comienza a comersela con desesperacion, se la engüia toda, veia desaparecer toda la verga de Oswaldo cada ves que ella se la metia en la boca, el solo ponia cara de placer y una risa retorcida de satisfaccion.
Se pusieron de pie un momento, ella dandole la espalda a el, Oswaldo la abrazo y comenzo a tocarle las tetas, le pelliscaba los pezones, ella jadeaba, el metio la mano en las bragas y comenzo a meterle un dedo en la vagina, ella comenzo a convulcionar.
El le pregunto si quiera ser follada parada, en el sillon o en la cama, ella dijo que en el sillon, que siempre queria ser suya en el sillon de la primera vez.
El se puso el condon, y ella se dirigio hacia el, habrio las piernas todo lo que pudo y se clavo en el, la vi follar delicioso, se besaban, se tragaban la lengua el uno al otro, las manos de Oswaldo pasaban de sus tetas a su culo, ella le ponia las tetas por la cara, ella sabia que a el le gustaban mucho sus tetas y con eso lo exitaba, ella seguia cabalgandolo con desesperacion, como una perra en celo... hasta que se vino clavada en el, el tambien se corrio casi al mismo tiempo.
Ambos quedaron pegados como dos perros, sin poder separarse por un largo rato, seguian los besos y las caricias... ella le dijo Te quiero, el la beso, luego de unos minutos mas, nos fuimos a casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario